Se hace camino al andar.

«Se hace camino al andar» es una entrada escrita por Ernesto Bettschen.


En el mundo de la inversión, los compañeros de viaje son muy importantes.

Para mis primeras andanzas en este mundillo, me dejé aconsejar por la banca tradicional… Ellos, al fin y al cabo, se supone que son quienes mejor saben de finanzas, y quienes mejor podrían aconsejarme.

Pero… no salió del todo bien. Luego, con esa experiencia aprendida, hice un parón para evaluar las causas, para recomponerme, para estudiar…

Esa primera lección, la suelo resumir en una frase mía: “la banca no es tu amiga, es tu herramienta”…. Y la experiencia, mejor que yo, la resume Warren Buffet: “Cuando el hombre con dinero se encuentra con el hombre con experiencia, éste se queda con el dinero y aquél con la experiencia”.

Esta primera lección aprendida me sirvió para poder continuar mi camino. Un poco más sólo, eso sí, pero ya sabes, más vale sólo que mal acompañado

Fueron años apasionantes de aprendizaje, de experimentar, de hacer, de probar, con dinero virtual, con dinero real, con fondos, con ETFs, con acciones, con bonos, materias primas, divisas, en mercados primarios, y secundarios, con opciones y futuros, con sistemas automáticos de trading, haciendo, delegando, con compañeros de viaje que a ratos se iban cruzando por el camino… cada cual con mejor o peor fortuna.

De esta época, otra enseñanza aprendida: aunque las intenciones sean buenas, equivocarse en grupo, es al fin y al cabo equivocarse individualmente.

Y de equivocación en equivocación, poco a poco, uno va aprendiendo. Lo grave no es equivocarse, lo grave es no dar la oportunidad ni siquiera a la equivocación. No hacer nada. Tengo claro que me he equivocado en muchas cosas, pero la actitud frente a esto es que la próxima vez, me equivocaré mejor…

Luego, me di cuenta de que aunque se escribe muchísimo sobre finanzas, el 99’9% de todo ello está orientado al corto plazo, a la inmediatez, a fomentar un escenario en el que hay que operar, y cuanto más mejor…  Una vez más, esto no era tan bueno para mí… y ganara o perdiera yo, era siempre bueno para los intermediarios (tasas de bróker, canon de bolsa, etc).

A cada paso que daba, leyendo, estudiando, experimentando, me iba dando cuenta de una cosa: “si haces lo que todo el mundo hace, obtendrás los mismos resultados que todo el mundo obtiene”. Y entonces, pude decidir cambiar el paso.

El 0,1% restante de información fue una revelación. Resulta que, lejos de la prensa salmón, de grandes medios, de publicaciones oficiales o libros de autores de reconocido prestigio, una pequeña comunidad parecía haber llegado a las mismas conclusiones que yo… y estaban ahí, de forma modesta, pero no sólo disponibles, sino deseando compartir su conocimiento. En esos círculos fue mi primer acercamiento a la inversión (alejándome cada vez más de la especulación), a términos como “largo plazo, ”value”… y llegando al paradigma de la indexación (que no será lo mejor, ni lo más rápido, ni lo definitivo, pero a mí, desde entonces y hasta ahora,  me funciona).

Echando la vista atrás, veo un largo camino recorrido. A la gente que ha empezado a invertir siempre les digo que la única diferencia entre ellos y yo, es que yo empecé antes. Que las cifras neta no importan, ni siquiera el %… que el tiempo que tenemos por delante es el mejor y más seguro apalancamiento con el que uno puede contar.

Al final, esto me ha dejado el convencimiento de que el tiempo es el activo más valioso que hay. Porque el dinero mal invertido, al fin y al cabo, puede llegar a recuperarse…

Y tras echar la vista atrás, pues toca mirar al frente y delante de mi se perfila el  camino por recorrer (esperemos que por mucho tiempo).

Sigo fiel a la búsqueda de la (f)independencia, tratando de mejorar mis habilidades técnicas (leyendo, estudiando, experimentando, no sólo sobre asuntos laborales, que es vital no descuidar las aficiones), mis habilidades interpersonales (con networking presencial o no, quedadas, conferencias) y mis habilidades financieras (sin dejar de aprender o experimentar, ahora mismo con roboadvisors y plataformas de crowlending). Conocimiento , personas, dinero.

Un camino que se presenta lleno de incertidumbre, pero que sólo hay una manera de recorrer: empezando a andar. Dando un nuevo paso. Y luego otro, y otro más…  Con determinación primero, añadiendo persistencia después. Porque no hay camino, se hace camino al andar.

Tal vez lo que persigo es que cuando la muerte me encuentre, me encuentre muy vivo.

Y hoy, por ser hoy, dejo por aquí dos pildorillas motivadoras: una cita y un vídeo de esos que merecen la pena revisitar de vez en cuando.

La cita:

“Nothing in the world can take the place of persistence. Talent will not; nothing is more common tan unsusccessful men with talent. Genius will not; unrewarded genius is almost a proverb. Education will not; the world is full of educated derelicts. Persistence and determination alone are omnipotent. The slogan ‘Press On’ has olved and always will solve the problems of human race.»


«Nada en el mundo puede tomar el lugar de la persistencia. El talento no lo hará; nada es más común que los hombres sin éxito con talento. La genialidad no lo hará; la genialidad sin recompensa es casi un proverbio. La educación no lo hará; El mundo está lleno de educados abandonados. La persistencia y la determinación son omnipotentes. El eslogan «Press On» ha resuelto y siempre resolverá los problemas de la raza humana».

(Calvin Coolidge. Trigésimo presidente de EEUU).

Y el vídeo: